3.4.07

Se estaba peinando y tenía al lado un espejo, así se peinaba por delante y de lado. Pero una ráfaga fría y una sombra le hizo dejar el peine. Nada, el espejo estaba sólo con su imagen. Siguió y de pronto otra vez. Esta vez le miraban. Algo alto, en sombra, fijamente. Con un frío interno se dijo que el espejo volvía a tener sólo su imagen. Y para salir del frío bromeó, tan mala no es mi imagen para eso, no?. Salió, con la excusa de que había terminado, pero ahora una serpiente negra rodeó sus pies. Es el gato. Pero estaba helado.

5 Comments:

Blogger Rodolfo N said...

No se...pero las angustias existenciales nos hacen confundir, a veces la inquieta mansedumbre de la realidad con fantasmagóricas imágenes que quiza escapan de alguna turbulencia de nuestro interior.Creo...
felices Pascuas, sin fantasmas!

2:45 PM  
Anonymous Anonymous said...

Que bien! Las aventuras de un Nagaro japonés. Yo soy un Nagaro peruano inmigrante en Barcelona.

2:10 PM  
Blogger simalme said...

Gracias Rodolfo, como siempre.
Jaja, qué curioso, elegí ese nombre porque me sonaba a japonés. Me alegro de que sea también de un hispano.

10:42 PM  
Anonymous Anonymous said...

hola como estas tu y tus seres queridos.
Saluds de chile, tú amigo de siempre comlo esta el trabajo

5:08 PM  
Blogger Quisiera Ser Poeta said...

Hola he quedado impactado con tantas emosiones al ver la película La vida de los otros;

Al navegar en tu interesante blog y ver los enlaces a otros me he atrevido a enviarte mi blog de poesía

www.aunquisieraserpoeta.blogspot.com

Gracias por tu aporte

3:38 AM  

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